-
Arquitectos: FFWD Arquitectes
- Área: 55 m²
- Año: 2018
-
Fotografías:David Benito Cortázar
-
Proveedores: Finsa, Ikea, MecaLux, SuperStudio
Descripción enviada por el equipo del proyecto. El espacio destinado al nuevo despacho de FFWD Arquitectes se sitúa en un edificio singular del ensanche de Barcelona. Se trata de un inmueble de uso industrial que originalmente estaba destinado a talleres, y en el que actualmente encontramos variedad de espacios destinados a usos diversos como estudios, talleres y showrooms. El edificio presenta una ordenada estructura de pilares y una distribución de los distintos departamentos que se ajusta a la retícula estructural. El espacio disponible ocupa una crujía estructural, desde el núcleo de comunicaciones verticales hasta la fachada posterior del edificio. Tenemos por tanto un espacio alargado con una entrada de luz natural al paramento opuesto a la entrada del estudio.
Para la resolución de los elementos que habilitan el espacio para su nuevo uso se ha optado por un sistema de estanterías industriales de acero, en clara referencia al tipo de edificio en que se ubican las nuevas oficinas. Se trata de un sistema modular industrializado de perfiles de acero que permite resolver la totalidad de los elementos del espacio, como son las estanterías laterales, las mesas #de trabajo, y el elemento central biombo que actúa como separador de espacios. El estudio se organiza en dos ámbitos: la sala de reuniones en contacto con el acceso, y el espacio de trabajo que se sitúa al fondo del local y en contacto con la entrada de luz natural. Para separar estos dos ámbitos se dispone un biombo con estructura de acero y urdimbre textil que abarca el área de reuniones sin establecer una separación visual total entre los dos ámbitos. Esta membrana es un elemento multifuncional que complementa la actividad de reunión en el estudio, permitiendo la colocación de muestras y la disposición de material de trabajo suspendido del entramado textil.
El sistema de iluminación se ha adaptado a la instalación existente mediante un sistema flexible de puntos de luz suspendidos. Se ha optado por la utilización de las lámparas desnudas huyendo de elementos decorativos. El sistema lumínico es un sistema domótico que permite adaptar la calidad de la luz según el momento del día. Se han programado secuencias lumínicas que simulan la luz natural y varían a lo largo del día para adaptarse a los ritmos circadianos de las personas. De esta forma la iluminación potencia la activación mental durante las primeras horas del día y la creatividad a partir del mediodía buscando una estancia agradable y una mejor productividad en el estudio.